Virginia, Estados Unidos
Autopista I-66Desde 2016, un proyecto busca transformar una de las grandes arterias de Virginia, aliviar la congestión, mejorar la seguridad y hacer la vida un poco más sencilla para todos sus usuarios.
Se multiplicarán los carriles, se instalarán sistemas dinámicos de gestión del tráfico y se mejorarán las intersecciones y los intercambiadores: la interestatal 66.
Todo, sin cerrar al tráfico la autopista en ningún momento. Por eso las vigas se mueven por la noche, cuando nadie las ve. Y el hormigón y el asfalto van reclamando su territorio poco a poco, sin levantar sospechas.
Cuando esté terminada en 2022, la nueva autopista I-66 contará con 35 kilómetros de carriles exprés, gestionados mediante tarificación dinámica, pero gratuitos para los vehículos de alta ocupación, así como nuevas rutas de transporte público y la ampliación de las zonas de estacionamiento. Además, de forma paralela, se construirán 18 kilómetros de vías para ciclistas y peatones, conectando rutas existentes sobre la I-66.