Planta depuradora de la ciudad de Houston

Con un coste de 168 millones de dólares, la Fase I de ampliación de la planta de depuración de aguas de 80 MGD (millones de galones/día) del Sureste, que finalizó en 2011, fue el proyecto más grande llevado a cabo en la ciudad de Houston.

La ampliación de la capacidad era necesaria no solo para aumentar el agua disponible para los 1,4 millones de clientes en la parte sureste de Houston y siete municipios adyacentes, sino también para cumplir los plazos del mandato del distrito en materia de hundimiento del suelo acerca de la reducción del uso de agua subterránea. El trabajo en equipo, la coordinación, los “imprevistos” y las innovaciones fueron la tónica de este exitoso proyecto en 14 acres de terreno que duró tres años y sufrió los efectos de varios huracanes e incluso nevadas en Houston.

El módulo de tratamiento 2 incluyó la construcción de cuatro nuevas cuencas de floculación y sedimentos, siete nuevos filtros, sistemas de soplado, estación de desagüe de alto servicio, bomba de caja dividida de 2.750 caballos de fuerza y accionamiento de frecuencia variable, estaciones de bombeo de residuos de transferencia y retrolavado, almacenamiento de productos químicos, instalaciones de tratamiento de productos químicos, instalación de un sistema SCADA mejorado y un sistema de seguridad en el sitio y entrada a la planta principal; instalaciones eléctricas e instrumentación; 2100 pies lineales de líneas de flotación de agua de 96 pulg.; y un nuevo depósito de superficie prefabricado de 13,4 millones de galones; dos nuevos espesadores de 100 pies de diámetro; y nuevas instalaciones de bomba de muestreo; y modificaciones a dos estaciones elevadoras existentes y al sistema de cloro.

El proyecto se completó antes de lo previsto, con un ahorro de 200.000 dólares para el propietario. Innovaciones: Desde un principio, el equipo del proyecto decidió utilizar un nuevo enfoque para la adquisición de equipos. Ningún método logístico “de tiempo ajustado” sería suficiente. Debido al amplio almacenamiento in situ y a un calendario extenso, los artículos con plazos de entrega largos se empezaron a fabricar en las primeras etapas del proyecto. El personal de la ciudad permitió la construcción in situ de un almacén temporal equipado con energía eléctrica y estanterías, que el equipo del proyecto utilizó como almacén. El equipo del proyecto también utilizó un terreno in situ para el almacenamiento de artículos que podían estar expuestos a la intemperie.